• INTRODUCCIÓN

    • Equipo Docente de Cátedra
    • Cuando se trabaja en arquitectura con un enfoque social, el arquitecto debe tratar de modificar la forma de enfrentar al proyecto. El arquitecto debería transformarse más en articulador social o activista cultural (Aravena:2007), que piense en sistemas para incluir de manera más decisiva en el proyecto la participación del sujeto que ocupará esos lugares. Estos lugares se dan en la ciudad, presentada como campo de acción donde se juega nuestro futuro (Henri Lefevre:1968) y que se formaliza como un lugar de encuentro capaz de resolver o profundizar aspectos sociales  determinantes que nos dan forma como sociedad (Jan  Gehl:2010).

      • Fundamentación

      La Asignatura Arquitectura IV, ubicada en 4to año de la Carrera de Arquitectura con Plan de Estudios Ordenanza N° 124/2017-CS, es el último Taller de Integración proyectual dentro del ciclo de Formación General, transformándose en la introducción para el ciclo de Formación Profesional.

       

      Introducción

      Siguiendo un esquema de complejidad creciente, la Asignatura abordará al Proyecto en un contexto de escala urbana, con consideraciones ambientales y arquitectónicas, composición multi escalar, una mirada sustentable y un abordaje multidisciplinar.

      Desde la dimensión ambiental, se promoverá la comprensión del entorno urbano a partir de diferentes variables como: expresión de identidad, así como el reconocimiento del rol de los equipamientos, la vivienda y el espacio público dentro de una estrategia urbana integral.

      Desde lo arquitectónico, se abordará el equipamiento como elemento articulador del tejido urbano. Se estimulará la capacidad de operar en sistemas urbanos poli-funcionales, formulando programas arquitectónicos complejos.

      En un contexto de hiper-conectividad, modelos BIM, diseño paramétrico e inteligencias artificiales, se hace imperativo que la formación académica colabore en propiciar el juicio crítico y un marco decisional en el estudiante. Para lograr estos objetivos, se considera a la argumentación propia del estudiante como una clave del pensamiento proyectual, donde la materia (fabrica)  se transforma en lenguaje (texto, comunicación) por medio de un proceso racional (ratiocinatio) y de contemplación (meditatio) del medio social y cultural que debe dar como resultado respuestas innovadoras.

      Este espacio de Taller de Integración Proyectual buscará conformarse como vaso comunicante de conocimiento utilizando estrategias de articulación del conocimiento, con los saberes previos, y con las Asignaturas de 4to año según sea necesario (de tipo correlación o globalización), para superponer capas de conocimiento. El proceso de aprendizaje dentro del taller formará a los estudiantes en competencias y aptitudes en relación al Perfil del Egresado.

      Definiremos al Taller según se establece en el Plan de estudios: la estructura didáctica del Taller de Proyectos, considerado como espacio que estimule el descubrimiento, con carácter de laboratorio, caracterizado para ser un lugar de márgenes para plantear escenarios experimentales, en el cual se pone en práctica la idea de un practicum reflexivo, mediante el aporte y la crítica (…). Propicio para la actividad creativa, de invención y como modelo formativo para la reflexión, en el cual se promueve un intercambio de ideas (…).

      Se desarrollarán dos trabajos prácticos con un sistema pedagógico basado en la alienación constructiva de John Biggs y en un formato de aprendizaje en espiral. Se realizará un trabajo en cada semestre, que serán articulados con actividades de salidas de campo, charlas, debates, talleres transversales de desarrollo de habilidades, actividades en el campus virtual y exposiciones. El primer semestre abordará al equipamiento urbano y el segundo edificios de usos mixtos híbridos, según lo establecido en los contenidos mínimos.

       Posicionamiento frente a lo urbano: un intercambio de escalas.

      Como posición política e ideológica las prácticas didácticas, denominados Proyectos de Integración Proyectual, partirán de la noción del Arquitecto como actor de cambio social frente a la problemática del hecho urbano-arquitectónico inmerso dentro de un contexto específico. Se considerara al hecho urbano como algo complejo, donde principalmente se atenderá al límite ecológico desde lo físico-ambiental, los sistemas físico-espaciales, la historia del lugar y como ámbito para la realización de actividades humanas.

       La inmovilidad substancial de Rafael Moneo dice que la arquitectura alcanza su verdadero status cuando se realiza, cuando el suelo es lo que garantiza su condición de objeto. Sin el terreno, sin un específico y único lugar, la arquitectura no existe.

       El hecho urbano es un hecho social, tal como manifiesta Henri Lefevre en su triada espacio percibido/concebido/vivido donde nos habla de una simultaneidad entre una construcción física, una conceptualización mental y una experiencia vivida, reflejando las dinámicas sociales, económicas y culturales de una sociedad. Una arquitectura situada, en diálogo con su medio contextual no actúa de manera aislada.

       Este contexto en el cual se aborda al proyecto se da dentro de una relación de partes, donde se debe convivir con estructuras delimitadoras correspondientes a normativas y las condiciones del lugar. Tratan con la densidad, el uso del suelo, la morfología urbana, los tiempos urbanos y parámetros de sustentabilidad en relación al acondicionamiento térmico.

       Criterios conceptuales: de las partes a las reglas.

      Conceptualizar implica un proceso de abstracción para entender parámetros claves de la problemática proyectual y llevarlos a un plano de lo irreductible. Para problematizar y entender la conceptualización se utilizarán estrategias que permitan desarmar y volver a armar los temas de estudio, para lograr una coherencia entre idea y proyecto, entre concepto y texto. Esta síntesis es traducida de forma impactante por Bachelard en su libro El derecho de soñar, donde dice: Es la poesía de la metafísica instantánea, donde en un breve poema se debe dar visión del universo y revelar el secreto de un alma, del ser y de los objetos al mismo tiempo.

       La pregunta crucial consiste en cómo dar respuestas en un proceso conceptual que sea capaz de interpelarnos para no caer en las mismas respuestas de siempre.

       José Antonio Marina explica una aproximación hacia una cartografía mental: “Proyectar consiste en utilizar modelos mentales enlazados con el deseo de actuar, o con cualquier sentimiento que implique construir o crear… Para lograrlo, el sujeto utilizará todas sus operaciones combinatorias, extrapoladoras, inferencia e imitativas… Utilizamos los proyectos ajenos para construir los propios,… mezclándolos, interpolándolos, destruyéndolos y reconstruyéndolos (…)”.

       Existe una relación íntima e indisoluble, de mutua constitución, entre un artefacto material y la trama cultural en el que se produce (Liernur:2010). Los mapeos son un acto proyectual conceptual en proceso, donde los fragmentos conforman al todo, para dar certezas al producto arquitectónico.

       Se propondrá como recurso exploratorio el uso de la morfogénesis como herramienta de conceptualización formal, donde los caracteres o reglas son capaces de responder a diagramas espaciales, estructurales y organizacionales que definen posibles prototipos arquitectónicos.

       Por tanto, la exploración de recursos de comunicación y expresión  tendrán el objeto de dotar de herramientas a los estudiantes en su capacidad de argumentación. Todo proyecto entendido como ¨texto¨, debe poseer reglas gramaticales claras, o lo que Cristian Kerez denomina ¨reglas de juego¨. Estas reglas no son dogmas de acción, sino formas de visibilizar y entender al proceso proyectual para que los resultados sean consistente de principio a fin ya que demuestran una búsqueda de una lógica coherente y persuasiva.

       La forma arquitectónica y urbana

      La forma arquitectónica deberá ser la representación de la estructura interna, no es una forma aislada de su contexto cultural. Por lo tanto se enfatizará el uso del equipamiento urbano, el artefacto-objeto-urbano, como elemento integrador y estructurantes para dar certezas, en un mundo de complejidades crecientes. Estas certezas, son las que Joaquim Español denomina Consistencia. La consistencia, la cohesión entre partículas de una masa, puede entenderse como la trabazón de los elementos de un conjunto que le otorga el atributo de la estabilidad. La trabazón supone relación. Entonces podemos decir que posee estructura interna (ESPAÑOL:2007).

      Desde un concepto a una forma, lo que se buscará es generar certezas. Al respecto Mark Wigley afirma que: Esta imagen de la arquitectura como una síntesis entre el mundo de las ideas y el mundo material, también es una imagen de claridad, orientación, estabilidad, seguridad, orden y armonía. Por ello, describimos públicamente la arquitectura como una fuente de certeza.

      Programa/función/espacio

      La forma en arquitectura no puede ser disociada de su función. El equipamiento propuesto deberá promover o insertarse en el esquema de la ciudad polifuncional y policéntrica, que propone un desarrollo de la ciudad en una matriz de funciones que se solapan diversificando el tejido urbano en una búsqueda de cohesión social. Será objeto de estudio que los estudiantes puedan formular sus programas funcionales y dimensionarlos desde lo cuantitativo, sus dimensiones y su integración como parte de un sistema urbano.

      Desde lo programático resulta imperativo comprender la posible emergencia programática que los edificios necesitarán resolver, en su relación programática del tiempo urbano (cronotopos) y en su relación programática funcional arquitectónica interna. Pensar en espacios flexibles implica una adecuada articulación de los diferentes sistemas que confluyen en un edificio, permitiendo una mayor evolución y adecuación a los cambios del usuario (MONTANER MUXI:2011).

      Se debe entender que entre la función urbana y la propia del edificio debe haber una continuidad donde los espacios públicos que articulan a estos elementos son los vasos comunicantes de los actores sociales que intervienen.

      Los proyectos abordarán temáticas de equipamiento público y privado, con jerarquías de circulaciones, de escala media insertos en tejidos complejos (Arquitectura para la Salud, Educación, Institucional y de Transporte) y equipamiento urbano de escala media de usos mixtos (vivienda, educación y cultura) con equipamiento público o privado de complejidad alta con una densidad acorde a las necesidades contextuales del medio o tejido urbano donde se realicen las propuestas.

      El usuario

      Se pensará en un diseño centrado en el usuario, ya que la disposición de herramientas digitales que hoy están disponibles nos permite elaborar encuestas y modelos de obtención de datos capaces de dotar a los proyectos académicos de datos lo suficientemente verosímiles sobre los usuarios para acercarnos a una realidad concreta. Los usuarios de los proyectos de arquitectura en una escala urbana son heterogéneos, por lo tanto será obligación que los trabajos persigan la línea de la integración e inclusión de lo diverso dentro de su matriz de lógica productiva.

      La materia

      Lograr una consistencia entre contexto y texto arquitectónico obliga a introducir el cómo se construye el objeto arquitectónico. La forma arquitectónica es en parte el resultado de lectura urbana y del programa funcional, pero esto no responde el cómo debería construirse su estructura interna.  En el taller se introducirá el concepto de ensamblaje como una manera de darle forma al objeto arquitectónico. Pensar, Pensar construir, Pensar el QUÉ y el CÓMO construirlo, Pensar sin saber cómo: pensamientos vanos, Construir sin saber qué: formas vacías (CAMPO BAEZA: 2001).

      Ensamblaje, morfogénesis y cartografías proyectuales configurarán un aspecto esencial del taller, ya que potencian la idea del proyecto como un proceso. Porque interesa el proceso por el que discurría Miralles, que se basaba, por tanto, en relacionar y conectar una compleja red de conceptos y condiciones, tramando de forma laberíntica unos con otros, y donde cada uno de ellos encontraba su sitio en el proyecto. El azar como posibilidad y el tiempo como variable incontrolable (GILABERT SANZ:2020).

      Los Proyectos de Integración Proyectual se convertirán en un medio para investigar sobre la tecnología constructiva que posibilita construir ideas utilizando una revisión actualizada de lo que fuera denominado anteriormente por Aliata como una ¨Arquitectura de sistemas¨ (… ) como una metodología de proyecto que tiende a la constitución de un sistema de partes, funcionales y constructivas, apto para la materialización de diversos tipos de edificios. (… ) exhibiendo una coherencia de sus postulados internos en los que la idea de sistema va unida a la racionalidad constructiva en pos de conseguir la optimización de recursos (..).

      Esta comprensión del cuerpo material desde su esencia como hecho constructivo es capaz de invitar a una profunda reflexión sobre como racionalizamos los materiales y como estos se convierten en un ordenador de una estructura interna que deviene en la forma del objeto situado en un contexto cultural, ambiental y social.

      Los materiales de una idea construida, son la piel y estructura ósea donde la vida misma fluye de manera dinámica y están íntimamente ligados a su tiempo y a su entorno ambiental. Comprender el concepto  construcción significa penetrarlo intelectualmente, una vez que se ha abarcado materialmente todos los sentidos (DESPLAZES:2005).

      Sustentabilidad

      En este taller se deberá incorporar la variable ecológica, desde la escala regional, urbana y haciendo énfasis en la escala arquitectónica, ya que se requieren propuestas contextuales que aborden los límites ambientales existentes como opción de diseño para reducir el impacto ambiental que estos generan.

      Esto implicará que el pensamiento ecológico o sustentable debe nacer dentro de la génesis del proyecto y debe relacionarse, al contexto urbano, al medio natural, al contexto productivo, la historia del lugar, la materia y las prácticas sociales.

      Concluyendo con la Fundamentación, entendemos que el contexto y la materia constituyen el proyecto mismo: son el punto de partida desde el cual emergen la idea y el concepto arquitectónico. Estos se configuran como respuestas a necesidades programáticas concretas, expresadas en un lenguaje proyectual situado en un medio cultural. En este proceso, el proyecto no solo transforma el entorno, sino que actúa también como un espejo del estudiante, quien se proyecta a sí mismo como sujeto en construcción, en una búsqueda continua de sentido e identidad. (aedificare te-construirte).

      • Programa, Planificación y horarios 

            
      Formulario de contacto y presente primer día de clase LINK FORMULARIO

      Más que una arquitectura de sentidos, primero hay que pensar en una arquitectura CON SENTIDO. Video de charla por Grafton Architects: