La caída del Estado de bienestar es el proceso de debilitamiento o desmantelamiento de las políticas y estructuras estatales diseñadas para garantizar el bienestar social de la población. Esto implica la reducción del acceso a derechos básicos como salud, educación, vivienda y seguridad social, generalmente debido a políticas neoliberales, crisis económicas o cambios en la orientación política de los gobiernos.
Relación: en términos sociales, la falta de inversión pública genera ciudades con una notoria desigualdad, donde quienes tienen recursos pueden acceder a vivienda y servicios de calidad, mientras que otros deben conformarse con soluciones precarias. Por ejemplo, podemos observar la construcción de barrios privados cerrados en su perímetro por muros, y junto a ellos la presencia de barrios populares.
Esto impacta directamente en la calidad de vida, en la sensación de inseguridad y en la capacidad de las comunidades para desarrollarse de manera equitativa.